Lumaquin presenta un brillómetro imprescindible cuando se requiere controlar el brillo en zonas poco accesibles o de superficie muy pequeña.
El brillómetro ZGM 1120 de ZEHNTNER es un equipo portátil para el control y medición del brillo, ideal para superficies pequeñas, de difícil acceso o con curvaturas. Es ideal para las diversas necesidades de producción y los más exigentes requisitos en los procesos de investigación y desarrollo, ya que mide todas las gamas de brillo, desde superficies tipo mate hasta acabados de alto brillo. El equipo está disponible en versiones de medida desde uno, dos o tres ángulos.
Su fabricación en aluminio lo hace robusto a la vez que ligero y, su tamaño, muy fácil de manejar. Además cuenta con un sistema de calibración automático y un autodiagnóstico con indicador de desviación, lo que lo convierte en un equipo muy completo para la medición y control.
Un brillómetro de interfaz intuitiva
El ZGM 1120 cuenta con una interfaz intuitiva y en múltiples idiomas que permite un control de calidad más eficiente y productivo, por ejemplo, transmitiendo los datos de medición directamente a un ordenador o a una base de datos por medio de la conexión USB, lo que permite realizar informes completos en PDF o en Excel. Lumaquin lleva más de 40 años distribuyendo equipos y consumibles para laboratorios de control de calidad de la industria, proporcionando a los departamentos de I+D y de Calidad, los equipos de medida y control más idóneos para sus distintas fases industriales. Más información en www.lumaquin.com